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Se reunió la estructura priísta para presenciar el tercer debate presidencial

 
13/06/2018/TLAXCALA/Jorge Lezama/Misael Nava Corona
 
Se realizó el tercer debate presidencial, y los líderes y simpatizantes atentos siguieron la transmisión, tal fue el caso del PRI, que se reunió en el Salón Joaquín Cisneros para presenciar el debate y apoyar a su candidato presidencial José Antonio Meade.
 
Comenzó el debate, y en cada respuesta de su candidato, se escuchaban los aplausos y las muestras de apoyo para Jose Antonio Meade, a diferencia de las expresiones de desaprobación e incluso risas en los turnos de sus contrincantes.
 
Se repitió lo que en debates anteriores pero a modo de réplica, en el que los candidatos se interrumpieron en algunos momentos.
 
Cada candidato expuso sus propuestas sobre el origen de los recursos para realizar sus propuestas para el crecimiento económico, pobreza y desigualdad.
 
Luego tocaron el tema de educación, ciencia y tecnología, en el que cada candidato externo sus intenciones, hablaron de entregar tabletas, ofrecer cobertura general de telefonía, y demás cuestiones que ya se han escuchado en otros momentos sin que de verdad se diera a conocer el cómo realizarían lo expuesto en caso de llegar a la silla presidencial.
 
No faltaron las acusaciones entre los candidatos, si bien en gran parte mantenían la postura, no perdían la oportunidad de replicar las acusaciones de sus contrincantes sacrificando el tiempo disponible al micrófono.
 
En el tercer bloque sobre salud, desarrollo sustentable y cambio climático, se propuso cobertura «al cien», abasto de medicamentos, aumentar presupuestos, transición a combustibles amigables para el medio ambiente, rehabilitación de hidroeléctricas, y fuentes de energía alternativas.
 
Estos y demás planteamientos que anteriormente se han escuchado en actos masivos por parte de los candidatos, y aún continuaron con las acusaciones y los señalamientos.
Finalmente cada candidato cerro su intervención repitiendo lo que ya han manifestado, en tanto usaron sus últimos segundos para pedir la confianza de los mexicanos a través del voto.
 
Fue el último debate, y a 18 días de una de las elecciones más grandes que se han realizado en el país, habría que preguntarle a la ciudadanía si de verdad sirvió para decidir por quien votaran.