Pedro Morales
ESPECIAL
Santa María Texcalac, Tlax.- Autoridades y vecinos de la comunidad de Texcalac exigieron la intervención de las autoridades sanitarias y del ambiente, para que se estudien los efectos de la contaminación del agua, ante el aumento de males renales.
Crece la preocupación por que no hay control de la contaminación, “el olor a químicos en este lugar es insoportable por momentos, le han reportado los lugareños”, le dijeron lugareños al gobernador Marco Mena la semana pasada.
Le dijeron que tiene más de diez años la contaminación y reconocieron que con la planta mejorada en CIX-I va a bajar un poco la contaminación, pero el problema sigue, el olor ya es insoportable, sobre todo por las tardes y ni se diga en las noches.
Le dijeron que aguas pestilentes y residuales industriales con elevadas cargas de contaminantes son canalizadas hacia Santa María Texcalac, Apizaquito y la colonia San Isidro de Apizaco.
En esos lugares han causado la muerte de animales y enfermedades de la piel entre los lugareños y se asocian crecientes casos de insuficiencia renal como uno de los efectos de la contaminación.
Los reportes son alarmantes, los vecinos han sido constatados por las autoridades auxiliares de Texcalac y por ecología de Apizaco. Pero no se hace nada.
Advirtieron que los casos de insuficiencia renal se han multiplicado en Apizaco, concretamente en Texcalac, el mal ataca a niños y jóvenes y la principal sospecha es que sea a causa de la contaminación.
La finalidades gestionar un agua más tratada y soluble para la ciudadanía y que los mantos freáticos no se contaminen tanto, debido a todo el arrastre hoy en día desde los corredores industriales de Xaloztoc y Ciudad Industrial Xicohtencatl I.
Porque esta contaminación no se genera en Apizaco, tenemos que hacer notar el contexto que la contaminación proviene de otros municipios como Tetla, Xaloztoc, Yahuquemehcan, Santa cruz y Apizaco que van a iniciar un proyecto.
Se trata de llevar esta aguas a las plantas tratadoras de San Benito y Santa Cruz, para tratar más el agua residual de barrancas y ríos, el agua de toda la ciudadanía y de todas las empresas
“Es triste decirlo, pero en Apizaco y en todas sus comunidades vamos a ser muy exigentes con estos desarrollos habitacionales que pretendan generar en algún punto de la ciudad de Apizaco, para que ya tengan plantas internas para tratar el agua de los vecinos y de los ciudadanos”, advirtieron.
Es claro que en Santa María y Guadalupe Texcalac, tenemos ahora mismo un problema muy fuerte con la insuficiencia renal.
“Y no podemos decir que es congénito, o degenerativo, es algo que está sucediendo derivado de que se está contaminando el agua y los mantos freáticos”, aseguraron.
Por eso hay tantos jóvenes y gente que con antecedentes familiares que no tuvieron insuficiencia renal y que ahora resulta que tenemos muchos casos, por eso se va a recurrir a concientizar a la gente.
Advirtieron que “si no ceden quienes contaminan y que debemos tener una buena actitud, para comulgar con los ciudadanos, entonces tendremos que aplicar la ley. No es tanto la cero tolerancia, sino la aplicación de la norma para quienes omiten la ley”.
Los Vvecinos de Texcalac guiaron hasta el lugar en donde se vierten las descargas de las aguas residuales, el olor a productos químicos es insoportable.
Exigieron la inmediata intervención del gobierno para castigar con todo el peso de la ley a quienes resulten responsables, esta acción la calificaron como una acción criminal de los empresarios.
Partiendo del sitio donde el afluente del Zahuapan recibe la carga contaminante, la vida se acaba, el pasto luce quemado y no hay vida en el agua, incluso los animales mueren a los pocos instantes de haber ingerido el agua.
La suma extraoficial de los animales muertos es de cuarenta borregos, siete vacas, tres caballos y un número indeterminado de pollos, patos y guajolotes, mientras que los vecinos de Texcalac reportan la aparición de alergias en la piel y ojos.
A escasos trescientos metros de la presidencia municipal auxiliar de Texcalac, confluyen aguas residuales. Las de la Ciudad Industrial Xicohténcatl en esta ocasión presentaban un color rojizo, aunque en algunas ocasiones es verde o azul.
Todo esto en tres ríos de veneno y muerte que a su llegada a Texcalac es evidente que no reciben tratamiento alguno, las autoridades saben del problema desde hace años y nunca hacen nada.
Los análisis preliminares han detectado altas concentraciones de fenoles y polímeros y una alta presencia de PH, al grado de que podría ser considerada el agua con cierto grado de explosividad.
Víctor Sánchez Pozos informó que sufrió la pérdida de 35 borregos, que enfermaron luego de ingerir el agua contaminada, se les cayó la lana y murieron casi de inmediato.
“Los animales estaban sanos, hasta antes de beber el agua contaminada, consideró que es inútil acudir a las autoridades porque desde hace tiempo saben de estos casos, de la muerte de animales y de la contaminación que no se aguante en Texcalac”, aseguró.
Hay alarma entre los vecinos, sobre todo porque son quince mil los habitantes de esta población, más los de San Luis Apizaquito y de la colonia San Isidro, tan solo por citar a lo que corresponde al municipio de Apizaco.
El pasto se quema, los animales mueren de inmediato y hay mucho temor, sobre todo por la población infantil que acusa ya los efectos de la contaminación por medio de ronchas en la piel.
Incluso un manantial ha sido afectado y exigieron que se tomen cartas en el asunto, ya que incluso temen por sus vidas al aumentar el grado de la contaminación del agua.
Froylán Segura Martínez informó que sus borregas no tomaron agua, brincaron y cayeron al agua, al salir se murieron, fueron cinco borregos los que quedaron con la lengua e intestinos quemados.
Cuando abrió los borregos, el agua que le tocó los brazos le provocaron urticaria, además de que se han muerto vacas, patos, gallinas y guajolotes.
La afectación es grave, el pasto y la hierba se quema y al ingerir el pasto contaminado los animales mueren sin remedio.
Juan López Zermeño recuerda que las aguas eran cristalinas, la ocupaban para el hogar y hasta la tomaban, ahora el agua pasa como chocolate, apesta a químicos y ninguna autoridad acude en su auxilio.
Una vaca de su propiedad tomó agua del río, a las pocas horas se infló y murió, otros animales se han muerto en el campo y por temor las han dejado que se las coman los perros que también se han muerto al consumir la carne contaminada.
Isidro Vallejo Cuevas vive a la ribera de donde confluyen los arroyos, ha sufrido la muerte de cuatro vacas y tres caballos, han muerto en diferentes tiempos, solamente se comenzaron a esponjar y se murieron.
Tomaron agua al pastar y en este caso la muerte de los animales ocurrió por tomar agua de Ciudad Industrial Xicohtencatl, a veces el agua llega roja verde o azul, tenemos miedo, concluyó
Mucho llamó la exposición de una vecina de Texcalac, que puso el dedo en la llaga durante los foros ciudadanos, al señalar que ya van tres trienios sin que las autoridades municipales muevan un dedo para evitar la contaminación del agua.
Ni se diga de las instancias federales y estatales encargadas de vigilar que no existan descargas irregulares, invitó a los presentes a realizar recorridos por las noches, para constatar que los ríos emanan fuertes olores a químicos.
Sostuvo que la contaminación proviene de los corredores industriales de Xaloztoc y Ciudad Industrial Xicohténcatl I, que nadie toma cartas en el asunto e invitó al nuevo gobierno municipal a poner la muestra.
Urgió a enviar iniciativas de ley al nuevo Congreso local, para que se apliquen penas más severas a los contaminadores, trátese de quien se trate, se debe aplicar la cero tolerancia.