CDMX.- 23 DE MAYO DE 2018
Fijar una postura clara ante la ola de agresiones contra la prensa demandaron periodistas a los cuatro candidatos a la Presidencia de la República con una marcha en Chilpancingo.
Luego de que dos reporteros locales fueran detenidos, esposados y recluidos la noche del 20 de mayo en una comisaría en el poblado de Petaquillas, los periodistas protestaron en solidaridad con ellos y señalaron que a 54 días de campaña ningún candidato ha ofrecido una propuesta para enfrentar la inseguridad y cómo intervenir las graves condiciones que se viven en Guerrero para el desarrollo de la actividad periodística.
En un documento dirigido a Jan Jarab, representante en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, reprocharon las acciones de gobierno de Héctor Aastudillo emprendidas pues consideran que contradicen el derecho a la libertad de expresión y la seguridad de periodistas. En ese sentido enumeraron y narraron los casos de los priodistas Francisco Pacheco Beltrán y Cecilio Pineda Birto, asesinados el 25 de abril de 2016 y el 2 de marzo de 2017, respectivamente, sin que a la fecha halla avances en las indagatorias.
Otro caso en desatención es la denuncia penal que interpuso la corresponsal de El Sur en Zihuatanejo, Brenda Escobar quien el 1 de junio del 2017 fue amenazada por cubrir el caso del asesinato de la doctora Adela Rivas Orbe. En la misma situación se encuentra el de Marcela de Jesús Natalia, quien fue víctima de un atentado el 4 de junio del año pasado, cuando salía de las instalaciones de Radio y Televisión de Guerrero en Ometepec.
«Delito que no se castiga es una clara invitación a que se siga cometiendo, pues los agresores son sabedores que no serán castigados, esa es la tónica de la justicia y la persecución del delito en Guerrero», expuso el reportero Jesús Saavedra.
Los periodistas de Guerrero también suscribieron un pronunciamiento que hicieron compañeros de Sinaloa, en el marco del primer aniversario del asesinato de Javier Valdez Cárdenas y en el que sustancialmente señalan:
«Los periodistas en México no podemos seguir bajo amenaza de los gobiernos, políticos, narcotraficantes, ni de ninguna expresión de los poderes fácticos. Por eso exigimos un freno a los ataques en contra de los compañeros y un fin a la impunidad que caracteriza a las agresiones contra periodistas, que se expresa casi en el cien por ciento de los casos».
