CDMX.- 16 DE AGOSTO DE 2018
«Ahora, el río Atoyac, es tierra de nadie», señaló la directora del Instituto de Investigaciones en Medio Ambiente de la Ibero Puebla.
«En el problema de la contaminación del río Atoyac no basta con limpiar solamente el río sino toda la cuenca. El saneamiento puede tardar hasta 30 años», aseguró María Eugenia Ibarrarán Viniegas, directora del Instituto de Investigaciones en Medio Ambiente de la Ibero Puebla.
En el conversatorio sobre Desarrollo Sostenible y Gestión Ambiental, Ibarrarán Viniegas señaló que, «se ha construido mucha infraestructura sin tanto resultado, pero el problema real del río es la corrupción, porque no se ha atendido en años. Con la instalación de plantas de tratamiento no se resolverá el problema de la contaminación del río Atoyac. De fondo, hay un serio problema de gobernanza, porque intervienen muchos factores. Ahora, el río Atoyac, es tierra de nadie», señaló.
De igual manera, consideró importante aplicar las sanciones que correspondan a quienes contaminan el Atoyac:
«Las autoridades de gobiernos saben quiénes emiten los contaminantes. No será complicado que apliquen sanciones económicas, que son necesarias».
Para concluir, Ibarrarán Viniegas señaló que, «los gobernantes en turno deben entender que no se puede plantear proyectos de saneamiento sexenales o trianuales, porque no se logrará sanear en ese tiempo. Las enfermedades son crecientes. El problema del contaminación es grave».
