CDMX.- 24 DE AGOSTO DE 2018
Por mayoría de nueve votos, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) avalaron este jueves el derecho a una muerte asistida por ser distinta a la eutanasia o el suicidio asistido.
Señalaron que es válido el reconocimiento del derecho a una muerte digna en la Constitución de la Ciudad de México, que establece que “el derecho a una vida digna contiene implícitamente el derecho a una muerte digna”.
La Procuraduría General de la República (PGR) impugnó esta disposición argumentando que la muerte digna se refiere a la eutanasia y al suicidio asistido, conductas que están prohibidas en leyes federales y que se engloban en las materias de salubridad general que están reservadas a la Federación.
La sentencia de la Corte considera que la PGR no tiene razón, ya que el artículo de la Constitución local únicamente reconoce el derecho a la muerte digna como parte del derecho a vivir dignamente, en respeto al libre desarrollo de la personalidad.
La doctrina internacional apunta a varios conceptos que pueden incluirse dentro del derecho a la muerte digna, que no son la eutanasia y el suicidio asistido, por ejemplo, los cuidados paliativos para las personas en fase terminal o moribunda, el desarrollo y mejora de los estándares de calidad en los cuidados de estos pacientes y el apoyo psicológico en estas etapas”.
Los ministros de la Corte destacaron que no puede sostenerse por parte de la PGR, que el concepto “muerte digna” se refiere en automático y solamente a la eutanasia son o no válidas en nuestro país, sino que únicamente se afirma que “el derecho a una muerte digna” no necesariamente conlleva esas conductas”.
La SCJN también avaló lo contenido en la Constitución de la Ciudad de México, sobre el derecho a la sexualidad de forma libre, responsable e informada a que tienen derecho los ciudadanos.
Estos derechos, señalaron los ministros, los pueden ejercer sin discriminación y con respeto a la preferencia sexual, orientación, identidad y expresión de género sin coerción o violencia.