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ENCUENTROS CERCANOS EN LO ALTO DE LA MALINTZI; “YO SÍ CREO QUE HAY OTROS MUNDOS”: RAÚL ROMERO RIVERA

ENCUENTROS CERCANOS EN LO ALTO DE LA MALINTZI; “YO SÍ CREO QUE HAY OTROS MUNDOS”: RAÚL ROMERO RIVERA

TLAXCALA/ 30 /05/2020/Pedro Morales

Este sábado falleció el pionero de la radio en Tlaxcala, Don Raúl Romero Rivera,  deja un profundo hueco en la radiodifusión nacional; descansa en paz amigo, te recordaremos a través de tu diáfana narrativa  de epopeyas radiofónicas y periodísticas. Rogamos por una pronta resignación a su entrañable familia.

En su memoria.

“Vengo reviviendo algunos hechos curiosos, raros, que pasaron en el devenir de la historia de Tlaxcala, no muy antigua, lo del chango verde de Apizaco, lo de la niña de la Malintzi”, recuerda en exclusiva el comunicador radiofónico de Huamantla, Raúl Romero Rivera.

Raúl Romero, entrecierra sus ojos y pone su mente en acción y recuerda que, “veníamos en la carretera entre Huamantla e Ixtenco, cuando vimos una luz rara  pero de esto paso hace mucho tiempo.

¿En  qué año fue más o menos, en los ochentas, setentas?

RRM.- Yo era síndico del ayuntamiento y Joaquín era también parte del ayuntamiento.

¿Y Carlos Cejudo no?

RRM.- Bueno pero ese día los dos, entonces nos tocó ver esa, pero más que ver la luz lo que pasa es que vimos en el, yo siempre he observado mucho la montaña, la Malintzi y aunque no haya nada pero me gusta observarla.

Verla y así empezó.

Entonces en ese momento me di cuenta que había una cosa extraña en lo alto y entonces le dije a mi compadre Joaquín ¡párate!,  porque él venía manejando, párate tantito y él se orilló y nos dio tiempo de bajar del carro y todavía recargarnos en el toldo.

Pudimos observar, en ese momento, como se elevaba un, pues un aparato y se elevó, le dije espérate a mi compadre, que es esto, pues quien sabe, como un  helicóptero así hacia arriba.

Yo le calculé y le calculamos en esa ocasión como unos cuarenta o cincuenta metros en lo alto, le digo que será porque nunca, digámos rumbo al DF, quedamos muy sorprendidos, porque era una cosa extraña y en ese momento volvimos a ver de dónde había salido.

Ubicamos el lugar, y entonces vimos que en ese momento  surgió otra nave igual, otra igualita, también más o menos a la misma altura y entonces mira compadre que será, pues quien sabe, no es helicóptero ni nada porque toma una aceleración.

De momento la aceleración es muy fuerte.

Y entonces ya que estaba el segundo aparato a cierta altura se detenía ahí como el anterior, porque se detuvo al mucho rato, estuvimos observando bien, bueno de lejos, al filo de la montaña de la carretera y entonces se arranca pero éste en sentido contrario, o sea para acá, pasa lo vimos así rápido y este paso así.

Pasó como estrella fugaz, rápido.

Nos dio mucha curiosidad y entonces de ahí surgió nuestro interés por saber más, observar más la montaña y ese tipo de avistamientos que eran muy extraños, después quisimos  subir, entonces no había como después ya hubo hasta carretera para llegar.

Antes no había, costaba mucho trabajo subir y pues a un lado pues pararse porque ya no se podía más, pero en eso conseguimos prestado precisamente Betito Sànchez nos prestó una camioneta de doble rodada que tenía en ese momento y vamos hacia arriba.

Ya en la montaña y ya íbamos hacia allá, pero nos atascamos, para esto que la camioneta era tan ancha que una llanta iba volando y nosotros en la orillita atinándole, y llegamos a un lugar en donde nos atascamos, pero un atascamiento bárbaro.

No fácil de salir más que fuimos empujando la camioneta y caminando un metro, dos metros así, en eso nos dimos cuenta que una luz se veía y se apagaba, pero medidamente, o sea que no era constante, sino haga de cuenta que a cierto tiempo se encendía, y permanecía así un rato y se apagaba.

Si, se vio la luz, luego la que usted dice que fue una cosa mucho muy importante, fue encontrarnos a unos, bueno yo, porque yo iba muy cansado, ya me había dado un infarto.

Ya iba muy cansado y subir hasta donde se podía, más arriba, si hasta arriba donde brota el agua, hasta arriba y este me dice mi compadre, iba yo con Carlos Cejudo, no me acuerdo si fue el, no creo que esta vez no, nada mas fuimos los dos, mi compadre Joaquín y yo.

Le dije oye estoy ya muy cansado, ya no puedo subir, no pues vamos a hacerle la lucha a subir otro poco, entonces corte un palo como bastón y ya con ese me apoyaba yo y subía subía subía, pudimos subir un poco, y ya le dije ahora si ya tengo mucha sed, y no habíamos tomado ni llevado agua ni nada.

¿No llevaban nada?

Nada, nada, entonces ya no podía y fue entonces cuando yo me paro aquí, lástima que ese video, no video, bueno fotos, pero desafortunadamente no sé cómo se perdieron, ya no las volvimos a tocar pero este era atrás de mi yo iba caminando hacia arriba.

Mi compadre con su cámara, tenía una cámara que era una maravilla en ese tiempo que sacaba varias fotos disparan solitas, ya iba con mi bastón que apenas y podía y quiso sacarme el, te voy a retratar para que Irma vea, mi señora, vea lo cansado que vas, ahí voy.

Entonces aparecí como de aquí a allá al fondo más o menos con mi bastoncito y junto de mí no había nada, ya con mi bastón fue cuando me retrato, me saco el fotos de mí, de mi bastón y fue en las fotos que salió un hombrecito.

¿Y ustedes no vieron nada?

Nada.

Y ya en las fotos ya apareció.

Apareció.

¿Como de humo no?

Eh pues como de humo.

¿Esta foto salió publicada en la prensa no?

Sí, creo en la prensa salió publicado.

¿No se acuerda en qué año fue?

No me acuerdo de que año.

¿En los ochentas, setentas?

Ahora vera…

Para ubicarlo en la hemeroteca, yo me acuerdo que hace tiempo hice un reportaje parecido y si la encontré, por eso me acuerdo que son los muñequitos que van caminando con una especie de gorrito.

No me acuerdo, creo que sí, un gorrito

¿Cómo cuantos eran, como de que tamaño?

Como del tamaño, no muy grande.

¿Cuántos vieron en la foto?

Bueno, nada más uno, pero ese iba caminando, iba flotando con las piernas estiradas.

En movimiento.

Si, y fue la foto que saco mi compadre, pero fue una aquí, una adelante o otra más adelante, y en todas salió.

Qué curioso, estas fotos las publicaron en la prensa y en otro medio internacional creo, se hizo grande el mitote.

La prensa, el sol, ya después ya, quien sabe que fue de esas fotos, pero le voy a decir a usted que ocurrió, el monito no lo vimos, salió en las fotografías, así como un monito como de humo que iba atrás, junto de mi, caminando y este esa es.

Ya cuando proyectaron las fotos fue cuando vieron.

Fotos normales, total que saco como tres fotos distintas, de diferentes lugares y el monito iba caminando, iba flotando y entonces ya tenía tanta sed que híjole y ahora compadre, no hay nada, que subimos a donde brotaba el agua y tomar agua de ahí así con la mano, y yo de lo que me acuerdo es que era tanta la sed que me tome, llegando, cuatro botellas de agua pero agua con gas como la de tehuacan, pero me las tome así rápido

O sea que a la mejor  hasta se expusieron a algo que no saben.

Puede ser, y entonces yo padecí tres infartos, y me dijo el doctor, no haga tanto esfuerzo, quien sabe que, es peligroso, pero sin embargo yo me iba y ese día que tenía tanta sed, fui a tomar agua, y total que no había nadie.

No vimos a nadie aparente, y luego ya todo el tiempo y llegamos a la conclusión de que algo había ocurrido porque atrás de donde yo iba más o menos, a corta distancia, vimos una como nave, puesta en el suelo y yo creo que tenía alguna radiación, pero de eso sacamos foto, salió la foto pero nada más.

Es donde apareció la huella que le llaman el estadio, que hay un hundimiento de tierra redondo, que ahí quedo la huella.

Si, ahí quedo la huella.

Pero hubo otra también don Raúl que es la que me interesa también, que se llevo la Nasa donde apareció el cilindro a un lado según me comento Joaquín, que le tomaron otras fotos y apareció un cilindro  como de metal.

Ese es el cilindro que le digo, platillo volador no sé, era como un cilindro de arriba, fíjese usted que eso es muy importante, arriba digamos en el techo del cilindro había una cabeza de una gente, saliendo, y luego desapareció, y luego ya todos se nos volvieron nada.

Que se fueron caminando para atrás, algo los obligo a caminar para atrás.

Eso fue otra vez.

O sea que fueron varias que subieron.

Si y esa vez pudimos subir hasta arriba de la montaña, donde se perdió la niña y todo eso y  esa vez fue una cosa muy simpática, porque tanto esfuerzo para poder subir porque pues no era subir y ya, hay que hacer mucho esfuerzo, total que subimos lo mas que pudimos, lo más que pude, yo era el que estaba enfermo y todo, y le digo a mi compadre, sabes qué, entonces sí creo iba Carlos.

Carlos Cejudo.

Si, vamos a llegar donde se ve una curvita porque no veíamos nada, era derecho digamos, entonces se ve esa curvita que esta haya el fondo ahí vamos, y ahí vamos, con mucho esfuerzo y todo, con cuidado de no caerse, y  ya vamos llegando a la curvita esa donde ya se podía ver no vimos nada, porque ahí quien sabe que paso, que nos regresamos ahí para atrás a caminar, pero así, después de que nos costó trabajo subir, bajamos

Pero sin razón, sin conciencia.

Si, bajamos rápido, rápido.

Y no supieron ni por qué.

No, llegamos al coche, entonces dijimos, buenos si vamos para arriba, nos querían regresar.

Qué raro no, que estarían haciendo arriba quien sabe.

Quien sabe

Son cosas muy raras pero que son verdad, no tiene uno porque decir mentiras, lo que si me entere después Don Raúl, que eso fue lo más significativo, que usted de alguna manera tuvo más experiencias, usted  en lo particular, que a la mejor les dieron a algunas personas, o a una persona, a una mujer el don de curar, y algo de curaciones de hechos milagrosos, de hechos inexplicables, que a la mejor yo le tiraba a la conclusión que a la mejor usted adquirió algún poder, algo diferente.

Posiblemente esa vista que tuve cuando vi la cabeza y este creo que la radiación cuando vi al médico según estaba yo muy mal y a mí el doctor entonces me dijo oiga que bien le hizo la medicina, está usted perfecto, entonces algo me hizo.

En el organismo, y fue para bien.

Para bien.

Sabe porque retome esta historia, en particular la de usted,  porque venía con Martha Cesín, veníamos de un evento de la cruz roja, y ella comento dice don Raúl la verdad es un guerrero porque ya ha brincado muchas enfermedades y muy graves.

Algunas a la mejor milagrosamente, entonces yo empecé a atar cabos porque yo tenía conocimiento de que algo le había pasado a usted, entonces pues uno a veces el ser humano es incomprensible, y yo dije pues bendito Dios que lo ha ayudado lo que haya sido a vencer tantas enfermedades y graves, que bueno que las ha usted librado don Raúl.

Me han dado tres infartos, dos del corazón y uno cerebral, el más importante,  la he brincado, todo eso,  he tenido hasta cáncer prostático.

Y desapareció.

Me fui a Estados Unidos y haya me hicieron una siembra de semilla radioactiva y con eso haber fíjese usted, me quitaron totalmente el problema.

Y ya hasta ahorita, ¿cuántos años tiene usted?

Tengo 79.

La verdad yo lo admiro mucho, porque tanto que usted ha vivido recordar algunos detalles, pues mucha gente ya no se acuerda no, y por el tiempo, es mas Joaquín dice velo a ver a el porque ya no me acuerdo bien, pues yo lo estimo mucho.

Finalmente ya don Raúl para que lo deje descansar, esta serie de acontecimiento, que le diría a las nuevas generaciones, que sean escépticos, que crean que no crean porque apenas hace como dos meses se vio unas luces que andaban brincando, sigue pasando y a nivel mundial.

Yo tengo la idea de que hay seres extraños no somos los únicos, hay gente que vive en otros planetas, en otras galaxias.

Si esta inmenso el infinito.

Si, luego mucha gente no lo ve así,  no dice, es que son historias, pues si, está bien, pero que tienen una base.

No hay necesidad de inventar yo creo no, con qué objeto

No, y creo que es sabido, yo veo a Maussan cada ocho días y ve que hasta el Papa dice que no tardamos en contactar y yo creo en eso, en que nosotros pues pronto vamos a tener una sorpresa.

Pues ojala dios nos preste vida para ver esa sorpresa, ¿no cree?

Claro.

Quien sabe que vaya a pasar más adelante, mientras nos toca consignar lo que pasa a la historia, recordar cosas interesantes y pues ese es el trabajo mientras nos sigan dando la oportunidad.

Otra cosa que se me paso platicarle de estos monitos que vimos como de humo, si pero bien formados con sus piernas y brazos, este mi compadre Joaquín hablo a los Estados Unidos para comentarles y haber qué opinión tenían, entonces le pidieron que mandara las fotos originales, se las mando y se perdieron.

¿Se las llevo la Nasa no?, creo que se las mando a la Nasa.

A la Nasa, creo pero si las mandaron, lo importante es que al poco tiempo ya hubo una respuesta de parte de no sé quien ni como, ni porque, porque ya no me entere, pero resulta que habían analizado esos monitos y resulta que les encontraron movimiento, ve que ya es una versión mucho muy importante porque es de la nasa y todo eso.

¿Confirmaron que se trataba posiblemente de seres no?

Si.

Porque pudo haber sido una mancha o pues algo, pero si al tener movimiento y todo ¿da en que pensar no?

Si, descubrieron que tenían movimiento las piernas del monito aquel, no caminando, sino haga de cuenta que flotando, pero movía las piernas.

Y de ahí para acá se han seguido viendo luces en el cielo acá en Huamantla y en la montaña también luces yo las he visto, el dos de diciembre se apareció una luz roja del lado de Xochiteotla, por allá por Santa Ana apenas hace como dos meses se vio una.

Raúl Romero quiere abundar que vivió un momento muy difícil en su vida cuando quise meterme muy de lleno mentalmente en el aspecto ese, yo un día que le dije a mi compadre vamos a la montaña y a ver si hay luces etcétera, y desde aquí desde donde está la antena de la HT se ve muy bien.

Y pude observar, total que me metí tan fuerte en el asunto que perdí el conocimiento, si una cosa fea, ya me lo habían dicho los médicos, me dijeron no se meta tanto mentalmente porque le puede dar un infarto, pero quise observar y no vi nada y de pronto que empiezo a soñar porque pues fe un sueño, pero la cosa es que estaba ya muriéndome.

Empecé a soñar que me elevaba y encontraba una persona, a un hombre con barba, así ya grande, barba blanca y él me tomaba de la mano, me llevaba y luego entre las nubes, ya en el espacio.

Ya se iba el espíritu, el aura.

Yo creo que sí.

Vida después de la vida, es lo que ve mucha gente.

Y caminando así entre las nubes, que el señor me llevaba de la mano y este entonces lo más importante es que de pronto encontré a mi padre, mi mamá, todos muertos, hasta las sirvientas que me atendieron, Francisca y Marcela, hasta el paje y el mocito jorobado así con su cotón siempre y vi a todos y pues mucha alegría, pero no se oyó nada.

¿No hablaron?

No.

¿Pero usted los vio?

Yo los vi a todos

Donde va tanta gente muerta, pues ahí están a la mejor, en otro plano, en otra dimensión

En otra dimensión y para volver aquí me costó mucho trabajo, no podía revivir.

O sea que hubo posiblemente alguna conexión, porque pues no sabemos que tecnología o que alcance tenga este contexto, pero si ubica telepáticamente podemos decir, y lo indujo a ver todo eso para calmar el espíritu y decir pues ya cálmate no.

Porque a veces quiere uno saber tanto que hay confusión en la mente y a la mejor dice pues es el camino, el camino es la vida, el camino es la luz.

El camino es pues siempre vemos para arriba, esta mas allá y no sabemos que es, pero yo creo que también conocido con usted que hay algo mas allá.

Por algo estamos acá y cada quien cumple con una función específica, y solamente los creadores o el creador lo sabe, no podemos en un momento dado especular, tratar de hacer más que eso. Muchas gracias don Raúl.

Me costó mucho trabajo, no podía revivir, afortunadamente en eso fue mi señora, estábamos sentados aquí en el carro y viendo hacia arriba y de pronto una luz azul fue la que haga de cuenta que brotaba de mí hacia arriba.

Una energía en el momento en que usted estaba.

Si

Qué raro no.

Si, muy raro.

Pues quien sabe que contactarían, ustedes ni saben pero tuvo después manifestaciones como esta, ¿y ya no se han dado don Raúl?

No.

¿De momento paro todo?

Paro todo porque ya no le seguí, ya mejor por la paz.

También Joaquín dice lo mismo, dejo todo por la paz, dice que ya, ¿el que le sigue es el Cejudo no?, Carlos Cejudo creo que es el que si sigue.

También.

¿Hay cosas que a veces es mejor dejarlas por la paz no?

Mejor.

Raúl Romero concluye que esto es lo inexplicable, es como lo de las apariciones de los muertos y de los espantos, pues mejor ahí muere no Le digo aquí el único interés es rescatar estas historias tan valiosas y ponerlas a las nuevas generaciones y que juzgue cada quien,  no es ni su tesis de usted ni la mía, es algo que paso y no tenemos por qué decir mentiras y simplemente son hechos que quedaran ahí… PARA LA HISTORIA.