CDMX/ 30 /05/2020
Dos personas desconocidas le prendieron fuego al automóvil y vivienda de una enfermera identificada como Betty, quien logró escapar a tiempo junto con una amiga suya y una niña de siete años de edad. “Me intentaron asesinar”, aseguró la mujer, quien ya había recibido amenazas.
La agresión ocurrió en las primeras horas de este miércoles en el fraccionamiento Lindavista, al poniente de Mérida, cuando dichos sujetos vestidos de blanco y con el rostro cubierto arrojaron gasolina al automóvil y provocaron el incendio.
La enfermera, quien es jefa de Servicio de Terapia Intensiva del Hospital de Alta Especialidad del ISSSTE, reconoció que desde hace días recibió mensajes de amenazas en sus teléfono, en las que le exigían dinero, pero recalcó que no sabe de quién se trata.
La agresión finalmente ocurrió esta madrugada. Su compañera, quien también es enfermera, se dio cuenta a través de las cámaras de seguridad de la casa que el automóvil se estaba incendiando, por lo que salieron rápidamente para apagarlo, con ayuda de sus vecinos.
Al lugar llegaron bomberos y policías estatales para constatar los hechos vandálicos, pero al poco tiempo que se retiraron del lugar, el fuego se reavivó y consumió la fachada, la sala de la vivienda y equipos electrónicos. Los daños materiales superarían los 500 mil pesos.
“No puede ser que ocurran este tipo de cosas, las enfermeras nos estamos matando trabajando en esta pandemia, nos esforzamos para vivir tranquilamente como para que venga esta gente a agredirnos”, comentó Betty, quien sospecha que el acto violento se debe al simple hecho de ser trabajadora del sector salud.
Dijo que al revisar el video de la cámara notaron que dos sujetos provocaron el incendio y que incluso uno de ellos se quemó parte del cuerpo, pero lograron huir y hasta el momento no han sido identificados.
“Aunque ya no estoy tranquila, voy a regresar al trabajo porque soy una profesional de la salud, seguiré al pie del cañón. Pero no es justo que nos ataquen, nosotras las enfermeras somos las que estamos cuidando a la gente que se contagia”, sostuvo.
Por cierto, en redes sociales y en algunos medios de comunicación se empezó a especular que la agresión fue por conflictos personales o viejas rencillas, y que no precisamente el motivo tuvo que ver con su profesión.