Reporta Agricultura primer caso de influenza aviar AH5 de alta patogenicidad en granja de Sonora
México. A 29 de octubre de 2023. Redacción
Producto de la vigilancia epidemiológica que lleva a cabo la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, técnicos del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) detectaron el primer caso de influenza aviar de alta patogenicidad AH5 de esta temporada en una unidad de producción avícola de Cajeme, Sonora.
Una vez que el laboratorio oficial ubicado en Hermosillo, Sonora, reportó resultados positivos a influenza aviar H5 de alta patogenicidad, por la prueba de RT-PCR, los técnicos de la Comisión México- Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades de los Animales (CPA) del Senasica se movilizaron a la zona, con el propósito de realizar el diagnóstico de la situación y aplicar las medidas contraepidémicas necesarias para contener la dispersión del virus.
Entre las primeras medidas adoptadas, la Dirección General de Salud Animal (DGSA) declaró cuarentena definitiva total a la granja afectada y al estado de Sonora en cuarentena interna, lo que implica que para movilizar aves de las unidades de producción avícola (UPA) de la entidad es necesario presentar prueba PCR que demuestre la ausencia de la enfermedad.
Asimismo, la DGSA informó que en este momento los laboratorios del Senasica realizan las pruebas necesarias para contar con más datos sobre el virus que afectó a esta UPA, al cual se expondrán gallinas previamente vacunadas con el inmunógeno aplicado el año anterior.
Una vez que se compruebe la efectividad del biológico para proteger a las aves de la cepa que ingresó este año, el Senasica autorizará la aplicación estratégica de la vacuna e iniciará en Sonora.
La estrategia de vacunación podría comenzar en los primeros días de noviembre, en zonas de alto riesgo zoosanitario y en granjas que se dedican a la crianza de gallinas progenitoras y reproductoras, porque son fundamentales para preservar la producción de carne de pollo y huevo para el abasto nacional.
De igual manera, se podrán vacunar aves en zonas de alta producción avícola, a petición de los productores que así lo deseen, para lo cual deberán demostrar con estudios de laboratorio que sus aves están libres del virus y cuentan con el servicio de un médico veterinario responsable autorizado por el Senasica.
La dependencia de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural informó también que continúan las acciones de vigilancia epidemiológica y que, en caso de ser necesario, se activará el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal, para potenciar las acciones de control y, en su caso, erradicación de la influenza aviar de alta patogenicidad A, subtipo H5N1, así como para prevenir su diseminación por el territorio nacional.
La unidad de producción afectada cuenta con 90 mil gallinas de postura, ubicadas en seis casetas y en una de las cuales fueron sacrificadas 15 mil aves, que tenían 110 semanas de edad y que se consideran gallinas de fin de ciclo productivo.
En la investigación de campo realizada por personal oficial se observó que a 40 metros de la granja existe un canal de riego con abundante cantidad de patos migratorios, por lo que es necesario extremar las medidas de bioseguridad para evitar nuevos contagios.
El Senasica recordó que la principal práctica preventiva es la aplicación de estrictas medidas de bioseguridad en las granjas avícolas, en tanto que la vacunación es una herramienta para controlar el virus. Por ello, exhortó a los productores a elevar sus acciones en las granjas, con el fin de proteger la producción avícola nacional.
Es necesario, señaló el organismo, establecer protocolos sanitarios para las personas que ingresen a las UPA, lavar y desinfectar todos los vehículos; utilizar tapetes sanitarios en la entrada principal y en cada caseta y revisar cotidianamente la parvada para detectar aves con signos clínicos sugestivos.
También es indispensable no movilizar aves enfermas o muertas, las cuales deben ser aisladas o en su caso dispuestas sanitariamente; someter las excretas a un proceso de tratamiento térmico mayor a 56° centígrados; realizar periódicamente lavado y desinfección de instalaciones, material y equipo; considerar un periodo de vacío sanitario entre cada ciclo productivo e implementar procedimientos para el control de fauna silvestre y eliminación de fauna nociva, como la colocación de mallas pajareras.