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Trabajadores de central nuclear Fukushima hospitalizados por salpicaduras radiactivas  

Trabajadores de central nuclear Fukushima hospitalizados por salpicaduras radiactivas

 

29 de octubre de 2023

 

Dos trabajadores de la central nuclear de Fukushima fueron hospitalizados luego de sufrir salpicaduras de agua contaminada con materiales radiactivos. La medida fue tomada como precaución por el operador de la planta.

 

Como recordamos, la planta de energía nuclear de Fukushima sufrió una explosión masiva después del tsunami que azotó Japón en marzo de 2011, lo que provocó un grave accidente nuclear. Como resultado, toneladas de agua utilizada para enfriar los reactores debieron ser almacenadas debido al riesgo de estar contaminadas con radiación.

 

El 24 de agosto pasado, y con la autorización de la Agencia Internacional de Energía Atómica, la planta comenzó a verter estas aguas en el Océano Pacífico, asegurando que ya estaban libres de contaminación. Esto generó protestas de países vecinos preocupados por el impacto en el medio ambiente.

 

Si bien el agua es tratada para eliminar la mayoría de las sustancias radiactivas, aún contiene tritio, un isótopo de hidrógeno que no puede ser separado fácilmente del agua.

 

Según el reporte, el pasado miércoles, cinco trabajadores estaban limpiando tuberías en el sistema de filtración de aguas residuales para su vertido al mar, cuando dos de ellos resultaron salpicados debido a un accidente con una manguera que se desprendió. Otros dos trabajadores resultaron contaminados mientras limpiaban el derrame. Los niveles de radiación en los dos hombres hospitalizados eran iguales o superiores a 4 becquerelios por centímetro cuadrado, el umbral considerado seguro.

 

Un portavoz de Tepco, el operador de la planta, informó que «nos han dicho que el estado de los dos trabajadores hospitalizados es estable».

 

Esta situación vuelve a poner en alerta a la comunidad internacional sobre los riesgos asociados a la energía nuclear y la gestión de sus residuos. Las autoridades de Fukushima y Tepco deberán redoblar los esfuerzos para garantizar la seguridad de los trabajadores y minimizar cualquier impacto en el medio ambiente.