APIZACO/23/01/2019
En las tres primeras semanas de enero, que marcan el inicio de la temporada alta del flujo de ciudadanos migrantes centroamericanos a su paso por Tlaxcala y que diariamente cruzan por Apizaco, en el tren conocido como “La Bestia”, este fin de semana rebasaron la capacidad del albergue “La Sagrada Familia”.
Al comentar la situación del paso de migrantes centroamericanos por la estación del ferrocarril de Apizaco, Elías Dávila Espinosa representante de la Diócesis de Tlaxcala y de la organización “Un mundo, una nación” (Umun), indicó que a partir de enero aumenta la presencia de migrantes.
Dijo que este fin de semana arribó un grupo de alrededor de 300 migrantes al albergue de “La Sagrada Familia” , situación inusual que rebaso la capacidad de albergue que es para un máximo de 120 personas.
El presbítero recordó que Apizaco se ubica entre los cinco puntos más importantes en el trazo que tienen los migrantes rumbo al norte del país, y la autoridad tiene que ofrecer servicios y aplicar acciones de carácter humano, salud y educación.
Refiere que los migrantes, a su arribo a Apizaco, buscan abastecerse de alimentos y cobijas para luego subir al tren, aunque reconoce que algunos se quedan a vivir en comunidades aledañas.
Se calcula que 70 por ciento de las personas es de origen hondureño y en los últimos meses se ha detectado a homosexuales y lesbianas que huyen de su lugar de origen por el rechazo de sus paisanos.
El albergue para migrantes se abrió formalmente en octubre de 2010 por iniciativa del presbítero Ramiro Zárate Tonix, quien falleció en julio de 2012, con la finalidad de facilitar el tránsito de las personas centroamericanas en busca del sueño americano.
El apoyo netamente asistencialista no fue suficiente, de manera que este albergue se convirtió en asociación civil para ampliar los servicios que brinda a este sector de la población.
En febrero de 2011 se constituyó como asociación civil y el albergue opera con cuatro áreas: ayuda humanitaria, desarrollo humano y comunitario, derechos humanos, y defensa estratégica.
De octubre de 2010 a la fecha se ha atendido a alrededor de 20 mil personas. Cerca de 70 por ciento de esta población proviene de Honduras; en segundo lugar, de El Salvador, en tercer lugar de Guatemala, posteriormente población de origen mexicano de los estados del sur del país que se transportan en tren y, por último, los nicaragüenses.
Alrededor de 90 por ciento de las personas atendidas son hombres; estamos hablando de la mayoría y es una población con una edad promedio de 22 a 25 años; son jóvenes los que vienen.
El albergue se ubica en una zona estratégica de Apizaco, pues está a un lado de la vía y tiene una barda que los migrantes pueden ver desde La Bestia.
Personal que asiste a los migrantes comentaron que han recibido reportes en el sentido de que hay acoso, maltrato y extorsión de la Policía Federal y de los agentes del INM.
Se quejan de los guardias de seguridad del tren, quienes constantemente los extorsionan, maltratan y cobran una cuota para permitirles subir; abusan de las mujeres, que en ocasiones viajan solas, y además golpean a las personas, apunta.
Pese a esta situación, los migrantes no presentan una denuncia porque les urge llegar a Estados Unidos, además de que no confían en el sistema de justicia mexicano.
El flujo migratorio se ha incrementado por la situación económica que se vive en el ámbito mundial y que afecta a América Latina, sobre todo a los países de Centroamérica.
Comentó que este flujo por la vía del tren, es totalmente independiente de las caravanas que ya pasaron o que vienen en camino rumbo a la frontera norte, ya que esta ruta es la más antigua, aunque también a ultimas fechas es muy insegura.
Advirtió que en las inmediaciones de la zona de Apizaco se han dado agresiones con arma de fuego en contra de los migrantes y los accidentes no paran como el que ocurrió este fin de semana en la que un joven de 16 años le fue amputada la pierna izquierda al c aer a las vías por donde se mueve “La Bestia”.