TLAXCALA/14 /05/2019
A lo largo del año, varios edificios emblemáticos de la Ciudad de México se tiñen de distintos colores con una iluminación especial. Entonces, la luz se vuelve instrumento para conmemorar fechas como el Día Mundial del Agua o hacer conciencia sobre problemáticas como el cáncer de mama.
Apenas en 2017, la UNESCO proclamó el 16 de mayo como el Día Internacional de la Luz, a fin de celebrar mundialmente sus beneficios así como su importancia en la cultura, el arte y la sociedad.
La luz y el color se han convertido en comunicadores visuales que no solo sirven para transmitir emociones. También potencian los mensajes, por lo que son utilizados para informar y llamar la atención.
Hoy es común que fachadas, monumentos, palacios, fuentes y otros espacios urbanos, se vistan de luz y color en ocasiones especiales para convertirse en voceros de conmemoraciones.
Hasta hace unos pocos años, muchos se sorprendían de ver iluminados con ciertos colores espacios públicos como el Palacio de Bellas Artes, el Ángel de la Independencia, el Monumento a la Revolución, la Diana Cazadora y el Auditorio Nacional, una práctica que poco a poco se ha afirmado en México.
Por ejemplo, durante el mes de octubre, alrededor de 35 monumentos y sitios representativos de la capital mexicana se iluminan de rosa, en conmemoración de la lucha contra el cáncer de mama. Mientras que el 1 de diciembre, edificios emblemáticos se tiñen de rojo por el Día Mundial de Lucha contra el SIDA.
En junio, con motivo de la marcha del Orgullo Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Travesti, Transgénero, e Intersexual (LGBTTTI), los inmuebles se alumbran con los colores del arcoíris, símbolo de la diversidad sexual.
El 2 de abril, cuando se conmemora el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, edificios y monumentos emblemáticos se iluminaron de azul, con el objetivo de recordar la importancia de atender e incluir a ese sector de la población.
Mientras que el 8 de marzo, por el Día Internacional de la Mujer, los espacios se colorean de morado. Y apenas este año nuestro país se sumó a las celebraciones por el Día de San Patricio, el 17 de marzo. Ese día, la iluminación del Ángel de la Independencia, el Monumento a la Revolución y la Diana Cazadora, entre otros, fue de color verde, junto a más de 300 sitios de 50 países, pues México participó en el Global Greening para celebrar a Irlanda.
El Antiguo Palacio del Ayuntamiento, las fuentes de Petróleos y de Cibeles, la Bolsa Mexicana de Valores, el Palacio Postal, la Plaza de Santo Domingo, la Lotería Nacional y las sedes de las alcaldías, son algunos otros de los inmuebles que se han sumado a la iluminación especial en fechas conmemorativas.
En esta tendencia de alumbrar con color edificios y espacios públicos por medio de luz para crear símbolos con significados propios, capaces de comunicar ideas, también se resalta la forma, textura y belleza de las estructuras, lo que supone un atractivo más de la ciudad y que además nos invita a reflexionar.