CDMX/ 19/08/2019
En una granja de 240 héctáreas, en Bethel, Nueva York se dieron cita una treintena de artistas para pedir paz y equidad a través de su música. El encuentro musical que pretendía reunir alrededor de 100 mil asistentes se convirtió en el más grande de la historia, convocando a cerca de medio millón de personas
Tres días de paz y música. Este era el mensaje que encabezaba el cartel de Woodstock, feria de música y arte que se presentó los días 15, 16 y 17 de agosto en White Lake, en Nueva York, un encuentro musical que reunió a cerca de medio millón de asistentes en 1969 y que con el tiempo se volvió un referente en la historia de la música.
Artie Kornfeld, Michael Lang, John P. Roberts y Joel Rosenman fueron los cuatro productores y fundadores de este festival que durante esos tres días reunió a Janis Joplin, Jimi Hendrix, The Who, Joe Cocker, Carlos Santana y otros 28 actos musicales que se congregaron para alzar la voz por las minorías y el cuidado del medio ambiente.
“El festival nació con la paz como lema. Son tiempos críticos y aún seguimos comprometidos con asuntos sociales como el cambio climático y la necesidad de controlar el uso de armas», dijo Michael Lang durante una entrevista a EFE en la inauguración de una exposición en Los Ángeles con las mejores fotografías de estos tres días de fiesta.
Justo en el auge del movimiento hippie en Estados Unidos, el festival de Woodstock surgió como una forma de recaudar dinero para la construcción de un estudio de grabación que los organizadores pensaban montar.
Pero también fue una oportunidad para alzar la voz en contra de la Guerra de Vietnam y para hacer un llamado por los derechos de las mujeres, de las minorías y sobre todo hacer conciencia acerca del cuidado del medio ambiente.
El festival tuvo sede en una granja ubicada en Bethel, en Nueva York, espacio que fue cedido por Max Yasgur para realizar el festival y que hace dos años fue incluido en el registro nacional de lugares históricos de Estados Unidos por su trascendencia.
Aunque se estimaba la llegada de entre 50 y 100 mil personas durante los tres días de actuaciones, la cifra alcanzó casi el medio millón de espectadores. Fue tanta la gente que llegó que los organizadores tuvieron que volver gratuito el acceso, por lo que se generaron varias pérdidas económicas para los promotores.
Se logró reunir a más de 30 artistas, los grandes exponentes de la música en ese entonces. Richie Havens fue el primer músico en tocar, tenía en su haber apenas unos cuantos discos. Luego de esta presentación, su fama creció en Estados Unidos y le abrió una carrera que concluyó hasta su muerte en 2013.
Tras él llegaron las presentaciones de Sweetwater, Bert Sommer, Tim Hardin y Joan Baez, esta última cerró el primer día de actividades alrededor de las dos horas del día siguiente con seis meses de embarazo.
Al mediodía del sábado 16 de agosto de 1959, el escenario fue abierto por Quill y Country Joe McDonald; minutos después hizo su debut la banda Santana, liderada por el tapatío Carlos Santana. Horas más tarde otro mexicano haría su aparición, Fito de la Parra como baterista de Canned Heat. Ese mismo día destacarían las actuaciones de Creedence Clearwater Revival, Janis Joplin, Grateful Dead y The Who, entre otros.
Finalmente para el domingo darían muestra de su talento grandes artistas como Joe Cocker and The Grease Band; el músico popularizaría entonces el tema With a little help from my friends, una versión rockera de este tema original de The Beatles. Woodstock concluyó la mañana del lunes 18 de agosto con Jimi Hendrix sobre el escenario, para entonces la máxima figura del rock, con una multitud menor al medio millón de asistentes.
Las actuaciones en vivo se combinaban con algunas actividades artísticas que se extendieron durante todo el fin de semana. Y fue también un espacio para la libertad sexual. En imágenes se retrata cómo la gente andaba desnuda sin pudor, pues Woodstock fue un espacio de respeto para todos.
Al estar en auge el movimiento hippie, las drogas también fueron una constante en este festival. Sustancias de todo tipo fluyeron entre el público para disfrutar la música y los performance. Algunos especialistas señalan que la policía trató de detener a algunas personas que portaban mariguana, logrando llevarse sólo a unos cuantos. En tanto, una persona murió por sobredosis de heroína.
Su trascendencia
Woodstock se volvió por mucho un referente histórico de la cultura. La convivencia entre la música, los mensajes de paz y la numerosa asistencia que se reunió ese fin de semana de hace 50 años convirtió este evento en algo único e irrepetible.
Woodstock no es por mucho el primer gran festival en la historia de la música. “En realidad se realizó en una época donde eran muy comunes, pero este es el más famoso que hay por su tamaño y por la cercanía que tuvo con la ciudad de Nueva York”, refiere Adolfo de la Parra, baterista de la banda Canned Heat que junto a Carlos Santana fue uno de los mexicanos que estuvo presente en Woodstock.
El festival quedó plasmado en un documental que fue lanzado siete meses después. El material con más de tres horas de contenido fue dirigido por Michael Wadleigh, quien realizó una crónica de este evento reuniendo algunas actuaciones en vivo con anécdotas frente y detrás del escenario. Este largometraje ganó un Oscar en 1971 como Mejor Documental y logró otras dos nominaciones.
A lo largo de la historia, Woodstock es recordado como el gran festival de la música en el mundo, un referente para los amantes del rock. Incluso, la revista Rolling Stone incluyó este suceso musical en su lista de los 50 momentos que cambiaron la historia del rock and roll.
El sonido que marcó la época
En esa época el rock y el blues estaban en su mayor auge, esta es una lista de lo que sonaba en la radio.