CDMX/ 18 /05/2020
Ayer, ante la mirada atónita de los pobladores de la Huasteca Potosina, se suscitó una granizada con bolas de hielo del tamaño de una pelota para niño, además de otros tamaños menores.
Primero un cielo oscuro, acompañado de rayos y centellas, hicieron correr para ponerse a salvo de una buena mojada, no sabiendo que las grandes pelotas de hielo rebotaron por doquier.
Y ante los gritos de la gente que corría para todos lados en busca de un lugar seguro y no sufrir algún incidente, la granizada se suscitó ante la sorpresa para todo mundo.
De los muchos vehículos tronaron los vidrios y algunos otros daños, ante el golpe del descomunal granizo que hizo de las suyas; el ganado tampoco se salvo, y extraoficialmente se dijo que mucho fue herido por el pedrisco que cayó en cantidades grandes.
