CDMX.- 26 de abril de 2018
Varios disparos de arma de fuego provocaron psicosis y alarma entre gran cantidad de gente que se encontraba realizando sus compras en la tienda Soriana de esta ciudad.
Todo se volvió un caos mientras que todos corrían a resguardarse para no ser víctimas de las balas. Unos segundos después de la balacera, las personas vieron que había quedado un hombre inerte tirado en el piso mientras que una mujer ajena a los hechos y que se encontraba propiamente en el lugar equivocado, tenía una lesión en la pierna.
Eran alrededor de las 4:20 de la tarde del pasado domingo, cuando de pronto disparos de arma de fuego paralizaron a decenas de personas que habían acudido a la citada tienda en la colonia El Salitre.
En el lugar, las personas dijeron simplemente haber escuchado unos disparos de arma de fuego que hicieron que el hombre cayera al suelo ensangrentado, así también una mujer que caminaba por el lugar resultó lesionada en una pantorrilla.
Elementos de la policía y paramédicos de Cruz Roja se presentaron en el lugar minutos después de que varias personas de manera anónima hablaron al número de emergencia 911 para pedir auxilio, tanto a la policía como a paramédicos de la Cruz roja, para que atendieran a las víctimas, quienes quedaron justo en el pasillo que está antes de ingresar a la tienda, por donde se ubican unos stands donde venden dulces típicos mexicanos y uno más de joyas.
En el lugar, los elementos encontraron en el piso a una persona del sexo masculino, de aproximadamente 35 años de edad, que ya carecía de signos de vida y que fue identificado con las iniciales I.M.T. y que era vecino de la colonia Iturbe.
Se informó que el cuerpo fue levantado por personal de la Procuraduría de justicia del estado y donde además aseguraron algunos indicios más como casquillos percutidos.
Así también estaba una mujer de unos 55 años, quien recibió los primeros auxilios y fue trasladada al hospital general Tula-Tepeji.
De manera extraoficial algunas personas que estaban en el exterior de la tienda comentaron que presuntamente los posibles agresores salieron huyendo en un automóvil de color negro, el cual no pudo ser encontrado.
Así que al no haber detenidos, los agentes de la coordinación de investigaciones ya realizan la investigación sobre estos hechos, que no sólo alarmaron a las personas que comentaron “no creer que esto esté ocurriendo en Tula, donde años atrás había sido un lugar tranquilo, donde las familias podían salir a caminar, a realizar sus compras sin ninguna preocupación, pero lo de hoy dijeron es una luz roja que les alerta sobre hechos violentos de los que no dan crédito, porque la paz se está terminando y pareciera que la autoridad no se ha dado cuenta”.
